Las claves del partido:
La incoherencia ha asolado el Girona ya que no ha conseguido ganar más de dos partidos seguidos en lo que va de temporada y ocupa la octava plaza de La Liga, muy lejos de la misma posición en 2023/24, cuando era segundo y tenía 20 puntos más. Míchel no se ha dejado intimidar por su flojo comienzo y ha lanzado un reto a sus jugadores: clasificarse para Europa por segunda vez en la historia del club.
Los últimos indicios apuntan a que los blanquirrojos podrían estar recuperando algo parecido a su mejor forma. La victoria por 1-0 en Alavés inmediatamente después del parón invernal significa que han mantenido su portería a cero en partidos consecutivos por primera vez desde septiembre, mientras que una racha de tres victorias en sus últimos cuatro partidos de liga en casa (P1), con más de tres goles en cada victoria, significa que el Girona se ha situado a dos puntos de los seis primeros.
La historia sugiere que también podría tener éxito en este choque, ya que su rival, el Sevilla ha perdido los seis últimos duelos directos entre estos equipos, incluido un 5-1 en el partido correspondiente de la temporada pasada. Los nervionenses también llegan a Cataluña tras empatar 1-1 en el último suspiro contra el colista Valencia en su primer partido de liga de 2025, con la ayuda de su nuevo fichaje Rubén Vargas, que saltó al campo en la segunda parte.
Con este resultado, el equipo de García Pimienta acumula tres partidos sin ganar en todas las competiciones (E1, P2) y ha perdido sus tres últimos encuentros a domicilio, en los que ha encajado la friolera de 12 goles. Debido a esta mala racha, el Sevilla es decimotercero y se enfrenta a un posible tercer final consecutivo en la parte baja de la tabla -algo que no ha hecho en lo que va de siglo-, mientras que el sábado también podría sufrir cuatro derrotas consecutivas a domicilio por primera vez desde marzo de 2023.
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